Un villano con dudas

Megamente

Sin ser demasiado innovadores en cuanto a las ideas, la nueva película de Dreamworks tiene unos resultados muy buenos en cuanto a los efectos de animación y el guión. Básicamente el argumento gira en torno a un personaje, Megamente, que se volvió un villano, por esas cuestiones que tiene el destino, ya que había nacido con todo para ser un súper héroe, el mas respetado y querido por el pueblo, pero para su desgracia fue enviado por sus padres al planeta Tierra, donde habitaba un chico mas guapo y mas fuerte que el. Este enemigo llamado Metro Man también había sido enviado desde el espacio a nuestro planeta.

El problema es que eran dos opuestos. Desde chico Metro Man tuvo siempre lo mejor, lo mimaron mucho, y tenía una vida llena de lujos, mientras que su antítesis Megamente fue criado en la prisión. A esto se suma que Megamente es feo, cabezón, azul, flaco y tímido, loq ue lo convierte en un torpe de la socialización, mientras que Metro Man es guapo, y musculoso, loq ue le da toda la popularidad.

Es así que el propio Megamente decide aceptarse como el villano de la historia, y comienza a pelear con Metroman, quien demás está decirlo, siempre lo ha vencido, al menos hasta ahora. Tal vez lo mas interesante de la película es ver como el propio villano comienza a replantearse su propio destino. Esa reflexión inevitable que lo lleva a la pregunta ¿de verdad quería ser el malo de la historia?.

Así el filme se constituye como una buena película de acción para chicos, y también adultos, donde el humor, la lucha y la aventura serán condimentos infaltables. Además hay que tener en cuenta que en cierta manera Megamente es una parodia de la historia de Superman, donde los heroes y los villanos son las principales estrellas del planeta.

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